¿QUÉ VENTAJAS APORTA PRACTICAR KICK BOXING?
Si has decidido empezar a practicar kick boxing, es fundamental que conozcas las ventajas que este deporte de combate aporta a tu cuerpo.

Mejora tus reflejos. Cuando empieces con las primeras sesiones de kick boxing, pronto descubrirás que vas a necesitar una gran capacidad de reacción. Tu contrincante va a intentar alcanzarte a través de golpes directos y certeros en cuestión de segundos. Por ello, a medida que mejores tu técnica también tus reflejos se verán recompensados.
Sirve para generar endorfinas. Gracias a esta práctica también liberas una gran cantidad de endorfinas, un químico natural que forma parte del "cuarteto de la felicidad" con la serotonina, la dopamina y la oxitocina. De hecho, puedes comprobar como tu estado de ánimo mejora tras una sesión de alta intensidad. De esta forma, es posible reducir los niveles de estrés y ansiedad.
Potencia tu resistencia. El kick boxing requiere una gran exigencia física que, a la larga, va a producir que tu sistema cardiovascular y respiratorio se fortalezca de forma considerable.
Fomenta valores como la disciplina. Hay movimientos que requieren una mayor técnica y, por tanto, son mucho más complicados de realizar. De ahí que debas aplicarte con la máxima disciplina a lo largo de todas las sesiones.
CONSEJOS A LA HORA DE PRACTICAR KICK BOXING

Es necesario apuntar que debes tomar ciertas precauciones antes de empezar a practicar kick boxing sin la ayuda de un entrenador, pues al ser un deporte de contacto cualquier protección es poca.
En primer lugar, hay que utilizar un par de guantes para evitar contusiones al golpear con los puños. Muchos deportistas también recurren a las vendas para cubrir debidamente los nudillos.
Asimismo, existen protecciones para la zona de las pantorrillas y el empeine, así como un protector bucal hecho de goma EVA que debes ajustar a la mandíbula o un casco protector homologado para resguardar correctamente la cabeza.
También se suele realizar un calentamiento previo y un estiramiento posterior con el objetivo de reducir las posibilidades de sufrir lesiones y/o desgarros musculares. Por último, es necesario hidratarse debidamente durante y después de dicha actividad, para así reponer las sales minerales perdidas por el organismo a través del sudor.